¿Te falta algún asiento en la sala de estar o en alguna habitación?. Entonces os interesará este proyecto para convertir un cubo de plástico en un bonito, práctico y decorativo puff. Sólo necesitáis un cubo de plástico, los venden en centros de bricolaje, aunque también podéis reutilizar un cubo de pintura vacío por ejemplo. Estos cubos constituyen una fuerte estructura para hacer un asiento o un reposapies.
Y si elegís la tela adecuada os quedará altamente decorativo, nadie podrá imaginar que esa magnífica otomana la habéis hecho a partir de algo tan simple como un cubo de plástico. Así que vamos a ver el proceso.
Los materiales para esta idea:
- Un cubo de plástico de 15 o 20 litros
- Varios metros de tela
- Espuma (un metro cuadrado de espuma de alta densidad y 1.60 m de espuma de 3 cm de grosor)
- Guata
- Tijeras
- Tiza de sastre o un rotulador
- Un cúter
- Pegamento en spray
- Grapadora
- Regla y cinta métrica
- Máquina de coser
Tomamos las medidas del cubo o simplemente lo envolvemos con la lámina de espuma y cortamos a la medida necesaria para que rodee todo el cubo. Después pulverizamos el pegamento sobre la superficie del cubo y pegamos la espuma a su alrededor.
Tomamos las medidas del cubo o simplemente lo envolvemos con la lámina de espuma y cortamos a la medida necesaria para que rodee todo el cubo. Después pulverizamos el pegamento sobre la superficie del cubo y pegamos la espuma a su alrededor.
Cortamos la tela a la medida del cubo y un trozo de cinta para ribetear con el mismo ancho, aparte cortamos un círculo de tela para cubrir la parte superior del cubo.
Cosemos la cinta de ribete alrededor de la parte superior de la tela, de vez en cuando hay que hacer pequeños cortes en la cinta para que se acople bien, sin tensiones.
Finalmente cosemos la costura lateral para formar el saco, en primer lugar lo coseremos de manera provisional para poder probar el ancho sobre el cubo. Hasta que veamos que encaja bien y ya podemos hacer el cosido definitivo.
Probamos una última vez y si ya lo tenemos como queremos daremos la vuelta al forro y cortaremos la tela sobrante de la costura lateral, eso nos facilitará la colocación.
Forramos el cubo con la tela y en la parte inferior grapamos la tela al cubo, poco a poco y doblando la tela de la mejor manera posible para que no forme bultos excesivos.
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Cortamos los sobrantes de tela, espuma y guata, pero dejando un pequeño reborde de tela que usaremos para el acabado final. Colocamos un trozo de tela para recubrir el fondo y lo grapamos.
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